Una publicación de The Colorado Trust
English Menu
Read in English

El oficial de policía de Florence, Colorado, Michael Gordon, de 25 años, ha sido testigo de cuatro o cinco sobredosis en los dos años que ha trabajado para el departamento policiaco. Dice que lo llamaron para que respondiera a otra el 6 de agosto pasado a la 1:43 a.m.

Un hombre estaba golpeando a la puerta del Departamento de la Policía de Florence, con voz de pánico y pidiendo ayuda. Gordon corrió a su automóvil y vio a una mujer de aproximadamente 20 años con los ojos cerrados.

“Estaba muy sudada, letárgica y no respondía”, dijo Gordon. La mujer estaba respirando profundamente pero el ritmo de su respiración no era normal, con pausas más de lo normales entre respiro y respiro.

La mujer había tomado heroína y ahora parecía tener una sobredosis. Gordon fue a su patrulla y agarró una dosis de naloxene, un antídoto para la sobredosis de opioides.

Durante una sobredosis de opioides, la droga debilita el sistema respiratorio y la persona usualmente muere por falta de oxígeno. Naloxone funciona al expulsar los opioides de los receptores cerebrales correspondientes, haciendo posible que la persona respire más fácilmente y que reciba ayuda médica.

Gordon proporcionó la droga en aerosol a través de los orificios nasales de la mujer, como se debe hacer.

“Tienes que respirar, no te vayas, vas a estar bien”, dice que le decía a la mujer constantemente. “Necesitas respirar, necesitas respirar”.

Después de un minuto, la mujer hizo una mueca cuando Gordon frotó su esternón, una técnica para evaluar la respuesta, y apretó un poco su mano. Entonces, dijo Gordon, él supo que el antídoto estaba funcionando.

El impacto de la heroína en el número de muertes ha aumentado en todo Colorado. En 2014, 899 personas murieron por sobredosis de drogas, según un análisis del Instituto de Salud de Colorado, una organización que recibe subsidios de The Colorado Trust.

En comunidades como Florence en el Condado de Fremont, al igual que en condados hacia al sur y sudeste del mismo, las tasas de mortalidad por sobredosis de drogas han aumentado más que el promedio nacional. La tasa de mortalidad por sobredosis de drogas en el Condado de Fremont en el año 2014 fue de entre 16.1 a 18 personas por cada 100,000, un aumento en comparación con la década pasada cuando era de entre 10.1 a 12 personas por cada 100,000, según el análisis. Esto es igual a casi siete u ocho muertes en el condado en 2014. El promedio nacional ese año fue de 14.7 muertes por cada 100,000.

Doce condados en Colorado tuvieron tasas de muerte por sobredosis de más de 20 personas por cada 100,000 en 2014, ubicándolos entre aquellos con las tasas más altas en el país, según el análisis. Nueve de esos 12 condados se encuentran en áreas rurales de Colorado.

Muchas personas en esos condados están tratando de salvar vidas utilizando naloxone.  El Departamento de Policía de Florence es uno de 23 departamentos que ha capacitado y equipado a sus oficiales con el antídoto para la sobredosis de opioides. En septiembre, la procuradora general Cynthia Coffman anunció un programa para capacitar a cada departamento de policía y sheriff  municipal en 17 de los condados más afectados por la epidemia de la heroína.

Sin embargo, la necesidad se extiende más allá de los condados incluidos en el proyecto, como en el condado rural de Custer, en el cual las muertes por sobredosis aumentaron de entre 6.1 a 8 muertes por cada 100,000 personas en 2004, a entre 18.1 a 20 muertes por cada 100,000 en 2014, unas de las tasas más altas en el estado.

Siete u ocho jurisdicciones adicionales se han comunicado con la oficina de la procuradora pidiendo recibir naloxone y capacitación, dijo José Esquibel, director de participación comunitaria para la Oficina de la Procuraduría General.

“Si podemos ampliar (el programa), sí, trataremos de hacerlo”, agregó.

Las farmacias también están poniendo naloxone a disposición del público. De hecho, en teoría, el proyecto 15-053 del Senado de Colorado cambió el año pasado la ley para permitir “órdenes permanentes” (standing orders) de naloxone. Esto significa que cualquier persona que se presenta en una farmacia participante puede recibir el antídoto sin receta médica. El año pasado, el Dr. Larry Wolk, director médico de Colorado y director ejecutivo del Departamento de Salud y Medioambiente, expidió una orden permanente para el estado para ofrecer acceso a naloxone bajo su licencia médica.

Idealmente, esto significaría que los usuarios, sus amigos y parientes, y las organizaciones que buscan reducir los efectos dañinos podría obtener naloxone para tenerlo a mano en caso de emergencia.

Pero por ahora en Colorado, la habilidad de proporcionar o recibir este antídoto que salva vidas todavía depende de la geografía y el uso de las agencias del orden público y farmacias locales.

El acceso a naloxone en las farmacias todavía está comenzando, dijo Robert Valuck, PhD, profesor de farmacéutica y coordinador del Consorcio de Colorado para Prevenir el Abuso de Drogas con Receta Médica. King Soopers, Rite Aid y un par de farmacias independientes tienen órdenes permanentes de proporcionar naloxone. Walgreens actualmente requiere receta médica en Colorado; sin embargo, esta cadena comercial está en proceso de capacitar a sus farmacólogos sobre el medicamento y planea ofrecer naloxone sin receta médica en octubre, dijo Phil Caruso, vocero de Walgreens.

Es importante levantar conciencia entre los doctores y farmacólogos también, dijo el Dr.  Valuck: “Va a tomar mucho trabajo educar a las personas y hacer que suficientes lugares lo tengan (disponible) fácilmente”.

Las comunidades del Condado de Prowers en el sudeste de Colorado han sido lentas en aceptar la magnitud del problema de la heroína, dijo Tammie Clark, directora del Departamento de Salud Pública y Medioambiente del Condado de Prowers.

“Pareciera que debemos seguir repitiendo el mismo mensaje para empezar a progresar”, añadió.

Pero finalmente está progresando, dijo Clark. A finales de noviembre, el condado de Prowers capacitará a sus oficiales locales encargados del orden público sobre el uso de naloxone.

El acceso en Pueblo está retrasado porque no hay suficientes farmacias que utilizan las órdenes permanentes, dijo el Dr. Michael Nerenberg, un doctor que trabajó en una sala de emergencias en Pueblo y el fundador de y voluntario en el programa Access Point Pueblo de intercambio de jeringas. Por ejemplo, el King Soopers más cercano para las personas que viven en Pueblo West está a 20 minutos de distancia.

“No es por nada, pero si no tienes medio de transporte, esa es una gran distancia”, agregó el Dr. Nerenberg.

Otro obstáculo es el financiamiento de los programas comunitarios asociados con naloxone. Lisa Raville, directora ejecutiva de la organización con base en Denver Harm Reduction Action Center, utiliza fondos operativos para comprar naloxone porque dice que no puede encontrar subsidios para financiar el medicamento, el cual distribuye gratuitamente a usuarios de opioides.

“Mis clientes no van a ir a una farmacia; quieren venir aquí”, dice.

El estigma hace que los clientes de Raville se mantengan alejados de las farmacias porque han pasado por experiencias malas con algunos farmacólogos que eligen no vender jeringas sin receta a los usuarios de drogas, dice.

El Centro de Educación para la Salud del Área del Valle de San Luis (SLV AHEC, por sus siglas en inglés), un ex beneficiario de The Colorado Trust, recibió $100,000 del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. para revertir las sobredosis de opioides en áreas rurales. Fue uno de 18 subsidios repartidos en 13 estados y duró un año.

La iniciativa incluyó 52 sesiones de capacitación con 560 personas, incluyendo 133 empleados de agencias del orden público y 427 miembros de la comunidad, dijo Freddie Jaquez, director ejecutivo de SLV AHEC. Pero la duración del subsidio fue “demasiado corta”, agregó, y el grupo tuvo que parar de hacer lo que había empezado, dejando a cinco poblaciones en el Valle de San Luis que necesitaban naloxone virtualmente inalcanzadas.

A pesar de la corta duración de las sesiones de capacitación, fueron “muy, muy exitosas”, dijo Jaquez. Desde abril, dijo que se ha salvado a nueve personas por sobredosis a causa del naloxone en el área.

Cualquier persona puede asistir al curso gratuito de capacitación de dos horas sobre naloxone. El curso lo organiza la oficina del Procurador General de Colorado. Para ver un horario de los cursos e inscribirse, visita esta página web.

Anna Boiko-Weyrauch

Reportera
Seattle, Wash.

Ve todas las historias escritas por Anna

Quizás también te interese esto

Suscríbete para recibir por correo electrónico nuestras historias originales.

Close