Una publicación de The Colorado Trust
English Menu
Read in English

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) han descrito las disparidades de salud bucal en Estados Unidos como “profundas”. El grupo racial al que perteneces, tu nivel socioeconómico, tu género o el lugar donde vives se relacionan todos con tu riesgo de desarrollar caries dentales, periodontitis y otros problemas bucales sin recibir tratamiento.

La salud bucal se considera ampliamente como un indicador confiable de nuestra salud física en general. “Lo que esté pasando en tu boca afecta la persona entera”, dice Christy Dodd, directora ejecutiva de la organización Oral Health Colorado.

Dodd menciona las conexiones entre la mala salud bucal y las enfermedades cardíacas, la diabetes, los desafíos encontrando empleo y más. La mala salud bucal entre las mujeres embarazadas también se ha relacionado con bebés que nacen prematuramente y con bajo peso.

Han pasado más de tres años desde que empezó la expansión de Medicaid en Colorado  bajo la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio (ACA, por sus siglas en inglés), la cual agregó aproximadamente 289,000 participantes y también amplió la cobertura dental para muchas personas que antes no la tenían. Una de estas personas es Christopher Smith, un estudiante en Northeastern Junior College que también trabaja en el Family Resource Center de Sterling.

Porque es seropositivo, el acceso a servicios de salud, incluyendo para su salud bucal, es especialmente importante para Smith. Las personas con VIH/SIDA con frecuencia sufren de resequedad bucal (lo cual hace que corran un mayor riesgo de desarrollar caries dentales) y, debido a la vulnerabilidad de su sistema inmunológico, corren un mayor riesgo de sufrir de periodontitis, caries dentales, verrugas bucales y úlceras.

“Honestamente puedo decir que no gozaría de la salud que tengo ahora si no fuera por Medicaid”, Smith dice. Su empleador anterior no ofrecía seguro dental, y Smith no podía pagar de su propio bolsillo para visitar al dentista. “Mi salud bucal se había deteriorado tanto que me tuvieron que sacar una cantidad importante de dientes”, agrega.

Smith atribuye su habilidad de recibir tratamiento, incluyendo puentes y dentaduras parciales, a la cobertura dental de Medicaid. Esto le ha ayudado a preservar y mantener sus otros dientes.

Sin embargo, aún con la expansión de Medicaid, datos preliminares del Departamento de Salud Pública y Medioambiente de Colorado (CDPHE, por sus siglas en inglés) sugieren que, mientras que algunas diferencias podrían estar disminuyendo, otras disparidades en los resultados de la salud bucal persistieron por lo menos entre 2010 y 2015:

Figura 1: Porcentaje de niños en Colorado con dientes en regular o mal estado. (CDPHE VISION, 2017)

Figura 2: Porcentaje de mujeres embarazadas en Colorado que reciben limpiezas dentales de un dentista o higienista dental. (CDPHE VISION, 2017)

Los datos del CDPHE muestran que más personas negras e hispanas que personas blancas en Colorado dijeron tener niños con dientes en condición regular o mala entre 2010 y 2015, aunque este porcentaje ha disminuido en años recientes para todos los grupos raciales y étnicos (Figura 1). Mientras tanto, durante el embarazo, cuando las mujeres pueden correr un riesgo mayor de desarrollar erosión dental y caries, las personas blancas en Colorado dijeron haber recibido limpiezas dentales más veces que cualquier otro grupo racial/étnico. (Figura 2), y esta disparidad podría estar empeorando.

Quizás, como era de esperarse, “el seguro dental es una de las causas principales” de estos resultados desiguales, según Sara Schmitt, directora de políticas para la salud comunitaria del Colorado Health Institute (CHI, por sus siglas en inglés), un beneficiario de The Trust. Y aunque la expansión de Medicaid aumentó la cobertura en el estado, siguen existiendo disparidades geográficas en los porcentajes de personas con seguro dental en Colorado.

Según los resultados de 2015 de la Encuesta de Colorado sobre el acceso a servicios de salud (CHAS, por sus siglas en inglés) que el CHI lleva a cabo cada dos años con el apoyo de The Trust, cerca del 87 por ciento de habitantes en el Condado de Douglas dijeron tener seguro dental—el porcentaje más alto entre todos los condados de Colorado. Mientras tanto, menos del 60 por ciento dijeron tener seguro dental en los condados rurales del sudoeste y noroeste de Colorado. La diferencia era aún mayor entre los ancianos: El 64 por ciento de los adultos mayores de 65 años en el Condado de Douglas dijeron tener seguro dental, pero solo el 28 por ciento de ellos dijeron lo mismo en el Condado de Mesa.

En el estado, comparando los datos por grupo étnico, el porcentaje de personas con seguro dental era ligeramente más bajo entre los hispanos. Además, este grupo tenía menos probabilidad de decir que gozaba de buena salud bucal que las personas blancas, según resultados de la encuesta CHAS más reciente.

Las últimas dos versiones de CHAS han encontrado disparidades no solo en la salud bucal y la cobertura dental sino también en el acceso a servicios. En el Condado de Douglas—el condado con el nivel más alto de ingresos en Colorado—los porcentajes de cobertura dental y visitas a proveedores han mejorado desde 2013. Otros condados menos prósperos no han tenido tan buenos resultados: El Condado de El Paso ha visto una reducción en los porcentajes de cobertura dental y visitas a proveedores en los últimos cuatro años.

Aunque tener seguro dental se asocia con visitar a un proveedor dental, el acceso sigue siendo un obstáculo en partes de Colorado. Según la encuesta CHAS de 2015, porcentajes más altos de habitantes en lugares como el área metropolitana de Denver visitan a un profesional dental con regularidad que en lugares como el Valle de San Luis y el nordeste de Colorado. CHAS también encontró que, en todo el estado, el número de hispanos que buscan servicios dentales es menor que el número de personas blancas.

“Quizás tengas acceso al mejor seguro del mundo, pero si no tienes un proveedor ahí que lo acepte, entonces no es una opción para ti”, Schmitt dice.

De manera similar, CHI encontró que factores como la disponibilidad de proveedores dentales, al igual que los tipos de seguro que aceptan (es decir, planes públicos versus privados), afectan si los niños tienen acceso a servicios dentales. Estos factores podrían explicar por qué el acceso tardío a los servicios dentales es más alto entre los niños negros e hispanos, otra disparidad que ha persistido—y quizás haya empeorado—a pesar de la expansión de Medicaid (Figura 3), según datos iniciales del CDPHE.

Figura 3: Porcentaje de niños en Colorado retrasando recibir tratamientos dentales necesarios. (CDPHE VISION, 2017)

¿Cómo se pueden disminuir estas diferencias en Colorado? La expansión de Medicaid debido a la ACA solo ha estado vigente por un par de años, así que es posible que necesite más tiempo para que se observen esos resultados. Dodd cree que simplemente agregando cobertura dental al Child Health Plan Plus de las mujeres embarazadas podría reducir significativamente las disparidades de salud bucal en Colorado. También recomienda implementar campañas de salud pública para motivar a la población a tomar más agua y menos bebidas azucaradas.

La fluoración del agua comunitaria sigue siendo una manera obvia pero esencial para producir efectos. Dodd dice que estudios han encontrado ahorros de $38 en los gastos de salud bucal por cada dólar gastado en fluoración, y esto podría ayudar a disminuir las disparidades de salud bucal entre las áreas rurales y las urbanas. Según Dodd, mientras que las comunidades en el Condado de Denver tienen agua fluorada, tres de las 35 comunidades en el Condado de Weld, dos de cinco en el Condado de Alamosa y 21 de 55 en el Condado de El Paso—incluyendo Colorado Springs y las bases militares cercanas—no la tienen. También señala que el Condado de Sedgwick no tiene agua fluorada ni ningún proveedor de servicios dentales.

Katya Mauritson, directora dental y gerenta de la unidad de salud bucal del CDPHE, también resalta la necesidad de reunir datos de manera más equitativa, además de más recursos para la recolección de datos a nivel comunitario, para diseñar programas más eficaces de intervención para la salud bucal. Ella dice que los datos del CDPHE a nivel condado de las personas afroamericanas, al igual que los datos a nivel estatal de los asiáticos americanos e indoamericanos, usualmente no pueden reunirse debido al tamaño pequeño de sus poblaciones.

Mauritson señala una reciente encuesta del Servicio de Salud India que encontró que el 54 por ciento de los niños indoamericanos/nativos de Alaska entre 1 y 5 años de edad ha tenido caries—un porcentaje similar a la de los hispanos en Colorado. Sin embargo, estos datos no se reportan a nivel estatal.

El ambiente político actual ha aumentado la incertidumbre sobre lo que sucederá con la ACA y los cuidados de salud, incluyendo la cobertura dental para aquellos que más la necesitan. Dodd dice: “Si el [gobierno federal] revoca la ACA, la pregunta podría terminar siendo qué servicios pueden recortar—y es altamente probable que consideren el beneficio dental [de Medicaid] para adultos”.

Smith explica qué significaría esto para él y otros: “Me he beneficiado de Medicaid…financieramente, físicamente y emocionalmente. Cuando me diagnosticaron con VIH, pude recibir cuidados médicos a un precio asequible. Desde entonces, he podido mantener mi salud física, lo cual hace que las cosas sean menos estresantes y mejora mi calidad de vida”.

“Es como que se completó el círculo”.

Ebele Mọgọ, DrPH


Aurora, Colo.

Ve todas las historias escritas por Ebele

Quizás también te interese esto

Suscríbete para recibir por correo electrónico nuestras historias originales.

Close